Ayer por la mañana caminaba por Insurgentes y me tocó ver algo de gente vestida de blanco con banderitas de México y carteles que por un lado decian Sociedad en Movimiento, y en el otro leyendas como unidad, paz, etc. Por el look me parece que todos los vecinos de la del Valle, Nápoles y Condesa salieron a tomar el sol y a tratar de cantar el himno nacional.
Lo triste del caso es que vi un par de conatos de bronca contra gente que pasaba y no estaba de acuerdo (supongo seguidores de AMLO); por fortuna había policias cerca y no llegó a mayores, pero de pacífica la gente bien no tiene nada.
Habrá que anotar que la citada organización (que al parecer es un patrocinador de los bonitos spots contra el bloqueo de Reforma y otros mensajes ácidos, que además solo ellos saben quienes son) que convocó supongo quería quedar bien con el pseudo-electo y se ve que había lana para playeras de los organizadores, pancartas, mantas, radiocomunicadores, etc. Además algunos autos de lujo andaban dando vueltas en Insurgentes tocando bocina (igual que en la campaña) muy contentos.
Lo único que falta es que estas demostraciones sean más apreciadas que las marchas de más de un millón de personas, y no solo las últimas de corte electoral, sino la famosa y olvidada marcha contra la violencia donde también la gente bien salió a manifestarse.
Si México fuera el bote de los pescadores que se perdieron en el Pacífico, unos y otros remarían en sentidos opuestos, y preguntemosle a esos pescadores que hubiera pasado.
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