A poco tiempo de que el computo de votos concluya, un grano de arena parece ser la diferencia. Pero mientras los medios publican los porcentajes en rojo, vale la pena girar esta geoda para ver otras facetas.
Al menos 40% de los electores potenciales desdeño la invitación y en esa medida el gasto electoral no ha sido efectivo. Podria aplicarse en este caso el slogan de la campaña de promoción del voto "si no votas, cállate", pero el mensaje de este sector de la población es "estamos hartos".
Del 60% de los que si votaron, las opiniones estan divididas; lo cierto es que el 35% aproximadamente tampoco ha votado por el pseudoganador.
Esto implica que el 75% de los votantes difieren del resultado; muy poca felicidad para los electores (casi una decepción tan grande como la eliminación de nuestra selección del mundial).
¿Qué debemos hacer para que el estado sirva a los ciudadanos?
¿Qué caris tendrá un gobierno de coalición y cómo participaremos en él?
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