¿Por qué nos encanta distraernos con las tonterías de alguien torpe? o ¿será a caso que el ex-vocero tiene razón, y lo tiene fríamente calculado?
Que si va Martita pa presidenta, que si el Hummer no es suyo, que si la estatua de su admirador panista veracruzano la ponen o la quitan (tratando de emular la caida de la estatua de Lenin o Saddam), que si lo invitan al partido de los Vaqueros (y los sala para que Nueva Inglaterra les pase por encima), que si sacó un libro y les tira a todos (hasta a su amigo GWB).
Por cierto, cuando escuche lo de la estatua, me acorde de la película esa de Rafael Inclán "El héroe desconocido" donde tirán el rollo de que el pueblo tiene a un gran héroe que es puro cuento, pero el choro sirve para hacer una colecta pal "menumento"; que similitudes , ¿no?
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